¿Aún no sabes cómo envolver tus regalos navideños? ¿qué te parece si en lugar de tirar el papel que utilizas lo siembras? Y aún mejor, ¡que germine!. Ya sea para realizar una tarjeta o envolver un regalo para esta época decembrina, el papel semilla puede ser una opción para ayudar al ambiente, no sólo reciclando, sino adoptando una planta.
Lo puedes conseguir en las papelerías grandes o en algún lugar especializado en reciclaje. También lo encuentras en tiendas en línea, en donde algunas pequeñas empresas te dan la opción de hacer invitaciones, tarjetas de presentación, y otros.
Te darás cuenta que unos son más flexibles que otros o que tal vez las semillas son grandes o pequeñas, dependiendo del tipo que sea, ya que puede ser de algún vegetal, una flor u otro tipo de planta. Si lo quieres para envolver un regalo, es recomendable que primero metas éste en una caja y luego la cubras, o bien que hagas tu propia “caja” con el papel. Es cuestión de crear y adornar como tu creatividad te indique.
Ahora que si no conseguiste el papel o no quieres salir a buscarlo, puedes hacerlo tú mismo. Sólo necesitas reunir el papel que quieras reciclar; la cantidad depende de lo que harás y el tamaño; si es para una tarjeta tal vez no necesitas mucho. Por supuesto, no pueden faltar las semillas que deseas agregar. Es recomendable que no sean demasiadas.
Una vez que tengas el papel para reciclar lo partirás en pequeños trozos y lo dejarás remojando cerca de dos horas en agua. Después lo pones en la licuadora y agregas agua, en una cantidad mayor que el papel. Si las hojas que decides reciclar tienen algún color de tinta predominante, es posible que el resultado se torne un poco de ese tono.
Retira el papel, que habrá quedado como una especie de pasta o engrudo, y ponlo sobre algún recipiente, en donde agregarás las semillas para que se incorporen a la mezcla. Recuerda que no debes poner demasiadas para que puedas escribir sobre el, si así lo deseas. Es como poner pasas o nueces a la masa de un pan.
Después quita el exceso de agua y ponlo sobre una toalla o en una superficie absorbente, y presiona el papel para que quede lo más seco posible. Dale la forma que tú prefieras, te puedes apoyar con un cuchillo o un cortador de galletas. Es importante que seque lo más pronto posible para que las semillas no comiencen a germinar antes de tiempo. Una vez seco, puedes perfeccionar la forma con unas tijeras.
Cuando el papel ya haya cumplido su función como envoltura, tarjeta navideña o el uso que le hayas dado, debes mantener el papel húmedo sobre un recipiente o plantarlo en una maceta y regarla para que la plata comience a crecer.
Ésta puede ser una bonita alternativa para reciclar y dar un pequeño distintivo a tus regalos de navidad, además de ser una actividad incluyente para la familia y amigos.