Por: Daniela Uribe
@DaniAcuarelas
Con los aumentos de la gasolina, el estrés vial y el ruido en la calle, ¿qué mejor que el uso de la bicicleta? El uso de la bici nunca dejó de existir en México, aunque si disminuyó con la llegada del automóvil, pero hoy en día los ciclistas son cada vez más.
El ciclismo es más que una moda que anda circulando por las calles de la gran Ciudad de México; es un movimiento a favor de un medio ambiente más limpio, una forma de vida saludable y una manera de convivir con la urbe. Con eso dicho, el Museo Franz Mayer organiza su primera exposición del año, reuniendo más de 50 bicis provenientes de varias colecciones, para retomar la importancia del uso de este transporte en una sociedad.
Esta exposición titulada La vuelta a la bici, curada por Ana Álvarez y Valentina Rojas, demuestra un punto de vista distinto hacia el uso de las bicicletas, no solo como medio de diversión recreacional, sino como un medio de transporte, como se utilizó desde su creación en Alemania.
El Embajador de Holanda, Marc Verschuur relató sus vivencias en su tierra natal y cómo la bicicleta es parte de su identidad como país, pues casi el total de los 11 millones de habitantes cuentan con una o dos como medio de transporte. “El ciclismo es muy estimulado en los niños, pues en la escuela primaria se les hace un examen para que aprender a utilizar la bicicleta de manera correcta”, comentó.
La vuelta a la bici consta de 13 secciones temáticas. Algunas de ellas expresan reflexiones sobre las ventajas del uso de la bicicleta; otras hablarán sobre el origen de la misma y su evolución con el paso del tiempo; en otras secciones se podrán observar materiales audiovisuales de la colección Pryor Dodge, tanto históricos como modernos sobre el uso de esta herramienta que, como la describe Ana Álvarez, es una herramienta de libertad.
Lo más importante serán los modelos que estarán exhibidos, como la Vagabundo de 1978, ejemplos contemporáneos y la joya de la exposición, una bicicleta plegable de guerra BSA de los años 40.
El recorrido por la exposición abrirá los ojos a todo aquel que piense que la bicicleta es solo una moda hipster y que el andar en bici es para pocas personas. Aquí se verá cómo la bicicleta ha trascendido con el tiempo y cómo influyo tanto en tiempos de guerra como en la moda de tiempos pasados. También se podrá interactuar con las calles desde las salas del museo, con una obra virtual que permitirá a los visitantes pedalear y recorrer las calles de la ciudad.
Más que una exposición de bicicletas, La vuelta a la bici es una reflexión social que explica cómo este medio puede hacer un cambio casi revolucionario en la vida del ser humano al ser sumamente saludable, ayudar a disminuir la contaminación y mejorar el estilo de vida de todos los que formamos parte de la sociedad. El tema del cambio climático es sustancial, por lo tanto esta muestra será de mucha ayuda para aquellos que aún no entiendan los beneficios de dejar de utilizar el transporte particular o público.
Como dice la canción de David Aguilar, La cumbia de la bici:
♫Te hallaré pedaleando, en el viaje de allá pa’ca.
Que nos vayan dejando un carril pa’ nosotros ya.
Puede darte varios cambios;
del manubrio a los pedales hay muchos males por reducir.
Siempre hay estacionamiento,
matas el estrés un rato y es más barato dímelo a mí.
Vámonos bajando panza,
vámonos librando venas con la cadena que hace fluir.
Vámonos al teatro en bici,
a la chamba y a la escuela, hasta el bicinema o hasta de aquí.♫
Andar en bicicleta no solo implica realizar una actividad física, también sirve como una manera de relacionarte con la ciudad y ver el transcurso del día de una forma más tranquila, sin claxon, sin tránsito y sin horas pico.
De manera paralela a la exposición, se ofrecerán mesas redondas, talleres, conferencias, recorridos y un ciclo de cine. Para que la obra fuera posible, el Museo Franz Mayer conto con la colaboración de más de 70 organizaciones, entre ellas están el Instituto de Políticas para el Transporte y el Desarrollo en México (ITDP), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la Secretaría de Medio Ambiente de la Ciudad de México (SEDEMA) y la Embajada del Reino de los Países Bajos en México.
La muestra estará abierta al público a partir de la primera Noche de Museos del año, el próximo 28 de enero con un horario de 19:00 a 22:00 horas.