Por Magdalena Carreño
¿Cuántas personas en la actualidad pueden afirmar que las historietas contribuyeron a su formación lectora?
Durante décadas existió un menospreció a este género. Sin embargo, actualmente existe una revaloración del mismo y se han abierto puertas a publicaciones cada vez más complejas, que dejan ver la riqueza de combinar dibujos y letras.
De mundos sepias a otros cargados de color, imágenes juguetonas y crudas, el estilo de14 ilustradores mexicanos aunados a la prosa de Etgar Keret en 13 relatos son reunidos en un solo libro, el cual devela la diversidad gráfica de la historieta mexicana, así como la forma en que se enriquecen los textos de uno de los autores más populares hoy en día.
Keret en su tinta, coeditado por Sexto Piso y la Dirección General de Publicaciones de Conaculta, es un homenaje gráfico a la pluma del ganador de una Palma de Oro en 2007 durante el Festival de Cine de Cannes, por la realización de Meduzot (Medusas), la cual ha logrado capturar a millones de lectores alrededor del mundo, a través de historias cargadas de humor negro.
La maestría de este contador de historias ha llevado a que su obra sea traducida a más de 16 idiomas, además de recibir varios premios literarios. En la introducción al libro, Keret explica que la idea de tomar sus narraciones y transformarlas en dibujos era algo natural, ya que mucho de lo que ha escrito ha surgido de una imagen.
“Después de la imagen llegaron las palabras, las frases y las tramas que se unieron para conformar una historia”, añade el autor de Gotas en las primeras páginas de Keret en su tinta.
Esta antología gráfica cuenta con la participación de Luis Sopelana, Alejandra Espino, Juanele, Jimena Sánchez, Augusto Mora, Yorko F. Muñoz, Ricardo García Micro, Dono Sánchez Almara, Adrián Pérez Acosta, Patricio Betteo, Richard Zela, Jis, Trino y BEF.
“Busqué entre aquellos dibujantes que me parecen interesantes en este momento, combinando veteranos con jóvenes promesas. Al final quise que fuera tanto plural como equilibrado”, explica Bernardo Fernández, más conocido como BEF, quien se encargó de conjuntar a estos artistas.
BEF, ilustrador de La calavera de cristal y miembro del Sistema Nacional de Creadores del FONCA, destaca en el prólogo que existe una gran diversidad en la historieta mexicana, lo cual la llena de una gran riqueza que queda manifiesta en Keret en su tinta, ya que los estilos pasan de “la gráfica espectacular al tono intimista” y “del cartoon a la ilustración”.
La selección de los relatos proviene de los libros de cuentos De repente un toquido en la puerta, Extrañando a Kissinger, Un hombre sin cabeza, así como Pizzería Kamikaze y otros relatos. “Yo iba leyendo los cuentos seleccionados y cuando me recordaban a tal o cual dibujante, o pensaba que podría ser un buen reto para tal otro, entonces se las asignaba”, detalla BEF.
La idea de realizar este homenaje surgió del editor Diego Rabasa, quien se lo propusó a BEF aprovechando la visita de Keret a la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, donde Israel era el país Invitado de Honor.
¿Y qué pensó Etgar Keret al ver el resultado?
BEF comenta: “Quedó fascinado. Decía que no se veía ni israelí ni mexicano, sino una linda mezcla”, con lo cual seguramente concordarán los lectores de esta publicación.