Gracias al avance tecnológico de los telescopios ópticos, se ha descubierto que los elementos constitutivos de la materia contienen espectros lumínicos que las caracterizan.
Cada elemento de la tabla periódica tiene una huella única que la identifica. De esa manera, los científicos son capaces de deducir los componentes que contiene cada astro en el cosmos.
Cautivada por ese avance científico y lo que conlleva, la artista catalana Eugènia Balcells (1942) creó la exposición Años Luz, que se presenta en la Galería Central del Centro Nacional de las Artes.
“Esta experiencia que verás nace de un encuentro. Yo, hace muy pocos años, de repente tuve conciencia; me llegó la información, de que los elementos que lo componen todo tienen una voz propia, tienen una firma propia, tienen una firma de luz. O sea, cuando un elemento se calienta emite unas radiaciones que son luz, y cada uno de los elementos lo hace de forma propia”, comentó Balcells.
Se trata de un recorrido que se fundamenta en el carácter estético de la contemplación de dichos espectros lumínicos y, así, estimular pedagógicamente el interés por profundizar más en la génesis del universo y, por lo tanto, de nosotros mismos.
La interpretación poética de la muestra se sustenta en cinco piezas, comenzando con el mural Homenaje a los elementos. Se trata de una versión distinta de la tabla periódica que muestra la huella de color que identifica cada elemento químico.
Le sigue Frecuencias, una instalación multimedia que entreteje esos rastros de color, dando como resultado una metáfora de la creación. La intención de explorar la composición del microcosmos de la materia se complementa auditivamente con la reverberación musical de Sonidos del Alumnio, una instalación interactiva compuesta por barras de aluminio que el visitante puede golpear para crear sonidos distintivos.
Años Luz continúa con otra instalación multimedia que representa al universo como una entidad que puede ser contemplada desde el exterior: Universos. Integrada por imágenes grabadas en el Observatorio del Roque de los Muchachos —ubicado en las Islas Canarias— y animadas por pantallas giratorias, la pieza va develando la trayectoria del Sol desde el amanecer hasta el anochecer, dando paso a un viaje a través del tiempo, para ver los cuerpos celestes que limitan con el horizonte, que nos permite ver la tecnología hasta ahora.
“¿Hasta dónde llega nuestra visión? Y llega hasta todo: 12 mil millones de años luz; es lo máximo de las últimas galaxias del deep space que pueden ver nuestros telescopios ópticos. Entonces, la obra Universos es un trabajo sobre el universo visible, no sobre el universo. El universo es un misterio. Sabemos muchas cosas, pero hay muchas cosas que no conocemos”, detalló la artista.
La banda sonora está compuesta a partir de las frecuencias electromagnéticas emitidas por el Sol, la Luna y los planetas, captadas y transcritas por la Agencia Aeroespacial de Estados Unidos.
La exposición finaliza con el documental Vislumbrar el universo. Se trata de una conversación entre la artista y el astrónomo Marc Balcells, enlazando los puntos de la ciencia con la estética del arte.
Además, se incluye un espacio de documentación y una serie de actividades como un recorrido guiado por la misma Eugènia, charlas en torno al espacio y a la relación entre arte y ciencia, observaciones astronómicas, pláticas con especialistas, actividades para niños y talleres.
“Sólo con 100 elementos se explica la vida de todos nosotros y de todo lo que está vivo. Es por ello que, el nivel de transmisión educativa de esta exposición es altísimo”, resaltó la curadora de la muestra, Eulàlia Bosch.
Dentro de dichos elementos, en la exposición destacan el oro, la plata y el cobre, que son los tres grandes conductores de electricidad.
Eugènia Balcells es una de las artistas pioneras del cine experimental y del arte audiovisual en España. Inicia su actividad artística a mediados de los años setenta y su obra gira en torno a la percepción humana, buscando un equilibrio permanente entre lo intangible y lo material, lo cual se refleja en su dinámica visión de la realidad.
Años Luz, que se suma a la celebración del Año Internacional de la Luz y las Tecnologías Basadas en la Luz, estará abierta al público hasta el 7 de agosto. Posteriormente, viajará el Centro de las Artes de Querétaro —emplazado en el ex convento de Santa Rosa de Viterbo—, y finalmente, se asentará en el Centro de las Artes de Nuevo León en Parque Fundidora.