Siempre hemos tenido la necesidad de contar historias. Con dibujos, con palabra escrita y hablada, y durante prácticamente toda la historia del siglo XX lo hemos hecho también a través de las imágenes. En el mundo moderno, la fotografía es una herramienta de comunicación muy poderosa por todo lo que puede transmitir en una sola toma.
Desde hace algunos años la fotografía documental ha ocupado un espacio muy importante para retratar aquello que casi no conocemos; nos permite descubrir lugares que nunca hemos visitado o realidades distintas a la nuestra. Este es el caso de Huicholes del Tabaco, proyecto del fotógrafo nayarita César Rodríguez, quien desde hace algunos años cuenta historias únicas a través de la tecnología.
César ha exhibido y publicado en importantes medios internacionales como VICE Magazine, The Trip Mag, Revista Lunfarda, Ubarnautica.com y Life Framer, mientras que en México su trabajo ha aparecido en Cuartoscuro. Recientemente recibió menciones de uno de los medios internacionales de fotografía más importantes: Getty Images.
En entrevista para Arte y Cultura, el fotógrafo de 31 años habla sobre este interesante trabajo, donde durante más de un año ha retratado a familias de origen huichol (grupo indígena mayoritario en el estado de Nayarit) que trabajan en la siembra y cosecha de hojas de tabaco, en situación de explotación. Entre las implicaciones de esta labor, estas personas comúnmente trabajan en contacto directo con pesticidas, en condiciones precarias, con salarios muy bajos, falta de acceso a una vivienda digna y se presentan también situaciones de trabajo infantil.
El fotógrafo ha dado a conocer el proyecto Huicholes del tabaco a través de Instagram desde hace poco más de un año. Gracias a las etiquetas o hashtags adecuados, su trabajo ha tenido mucha difusión, e incluso ha ganado menciones en cuentas como GettyReportage y EverydayLatinAmerica.
Háblanos sobre tus inicios en la fotografía.
Soy de Nayarit. Estudié administración, luego fotografía y después de eso me fui a viajar. Al principio creía que para tomar fotos uno tiene que viajar lejos, pero después me di cuenta de que acá cerca había muchos temas interesantes que se tenían que dar a conocer y muchos de ellos eran sobre violaciones a los derechos humanos. Empecé con un proyecto sobre jornaleros de la calle y después mis padres me dijeron que por qué no iba a la costa porque ahí hacían tabaco. Entonces, cuando llegué con los indígenas y me contaron sus historias, me di cuenta que era algo que se tenía que dar a conocer.
¿Cómo surge este proyecto?
Este proyecto se llevó a cabo gracias a la beca de jóvenes creadores del FONCA. Me estoy centrando en documentar las historias de los Huicholes en las plantaciones de cultivo, pero también voy a documentar sus lugares de origen, dónde viven, y para ello tendré que viajar a la Sierra. El proyecto dura un año, pero tal vez le voy a dedicar un año más a fondo. Quiero que sea muy profundo y muy dedicado para conectar bien sus historias y hablar de cómo los explotan, cuál es su sufrimiento y todo lo relacionado con esta vida que llevan. Todo empezó al visitarlos y platicar con la gente y me di cuenta de que alguien tenía que contar sus historias y pues así empecé. Por lo general me voy todo el día y me quedo como una semana con una familia y luego con otra.
¿Por qué hacerle una cuenta de Instagram a tu proyecto?
Inicialmente lo hice porque quería explicar que no es un proyecto mío sino de las personas a quienes estoy retratando, y busqué un medio para que se escuche más su voz. Además, pienso que a veces te distrae un poco ver los proyectos desde las cuentas personales de los fotógrafos, y quise que las personas se enteraran más del proyecto que de mí.
Otra ventaja que le veo es que, en redes sociales, puedes publicar en tiempo real; creo que está muy padre que la gente pueda ver tu proyecto y lo compartan a través de las publicaciones o menciones como pasa en Instagram. Algo también interesante es que, cuando la gente conoce los proyectos a través de esas cuentas, aumentan mucho los seguidores ya que genera visitas a tu cuenta y con ello que la gente conozca, vea de lo que se trat,a genere algo de conciencia.
Cuando hablas sobre generar conciencia, ¿a qué te refieres?
Ahora, con la cuenta de Instagram, me ha pasado que se acerca mucha gente diciendo que quieren apoyar, pero yo no quiero que sea de esa manera; la verdad es que a veces me dan ganas ayudar a esas comunidades y crear algo como una fundación, pero lo que me gustaría más y lo que busco con este proyecto es tener una influencia importante para generar cambios en la toma de decisiones desde arriba. Lo que en verdad creo que ayudaría sería que los patrones y quienes toman las decisiones en las empresas que compran este tabaco ya no actúen de esa manera; lo que me gustaría más es que la gente que está afuera comience a tener un consumo más consciente, para que las grandes empresas ya no continúen con esas prácticas, y para que cambien las condiciones de trabajo de los campesinos, que tengan una vivienda digna, que les paguen más y que se valore el trabajo que hacen para que no continúe esa situación de sufrimiento.
¿Cuáles te gustarían que fueran los alcances del proyecto?
A veces leo artículos en donde dice que esas grandes empresas están en contra del trabajo infantil, pero la realidad es otra. Entiendo que es algo muy difícil. Sin embargo, creo que mientras más gente lo vea, seremos más los que podemos cambiar esas situaciones. Por eso es que no he aceptado ayuda inmediata, porque creo que la ayuda que les puede llegar así de rápido es sólo ayudarles un ratito. Lo importante es hacer cambios estructurales. Actualmente la industria tabacalera obtiene ganancias multimillonarias por la comercialización de sus productos a costa del trabajo forzado en muchos países del mundo y salarios muy bajos en los campos donde se cultiva. En datos, alrededor del 40% del tabaco que se cultiva en México se exporta a empresas transnacionales y a pesar de que en los últimos años el tabaco ha incrementado sus precios con base en políticas de salud pública, las condiciones de quienes trabajan en sus campos siguen siendo las mismas.
Si eres usuario de las redes sociales, te invito a que conozcas el proyecto de César. También puedes visitar el sitio web, conocer y compartir esta interesante iniciativa que busca sacarnos de nuestra realidad, a través de otra de la cual podemos ser parte.