Por Magdalena Carreño
“…si quieres encontrar lo que buscas debes dejarte ir, la corriente el viento la gente que empuja o qué se yo arrastran todo hacia el mismo lado, la escoba recoge la basura, y allí al final encuentras lo que querías y te encuentras también tú.”
Cuatro vidas narradas brevemente atrapan al lector en El Conde y otros relatos, de Claudio Magris, coeditado por Editorial Sexto Piso y la Dirección General de Publicaciones del Conaculta.
Magris traza sus personajes desde lo más íntimo, como si se abriera un regalo lentamente, las emociones que envuelven la vida de sus protagonistas saliendo a la luz.
En El Conde, por ejemplo, el asistente de un pescador de cadáveres expresa la contradictoria relación de su “protector” con el mundo de los vivos y los muertos; mientras a unos los trata casi con dulzura, con los otros, especialmente las mujeres, se muestra cruel y despiadado.
El Ganador del Premio Feria Internacional del Libro de Guadalajara 2014, muestra cuatro existencias que no luchan ante lo irremediable: su destino. En La portería, un hombre exitoso renuncia a su entorno, a su familia y a los modelos que la vejez demanda para volver a trabajar y pasar sus últimos años tranquilamente.
Las voces recoge la historia de un hombre, cuyas relaciones con las mujeres son a través de las contestadoras. Llama, escucha la grabación y cuelga, no le interesa hablar con la persona real porque, para él, la mujer auténtica está en la voz grabada en la máquina.
“Yo he tenido muchas mujeres, voces de mujeres verdaderas, no esas muñecas que ves y escuchas que andan por allí en la calle. Bellísimas, diferentes, ásperas, tiernas, desafiantes, tímidas. Por caridad, no me estoy vanagloriando, además, no hay nada de qué jactarse, el catálogo de don Juan es odioso; todos los catálogos son estúpidos, porque cada voz es única e irrepetible y vale muchísimo más que el cortejador que las espía. Humildad, eso es lo que las voces nos enseñan.”
La última historia, Ya haber sido, cierra el volumen; es una suerte de nostalgia la que invade esta historia y una especie de consejo para llevar el día a día a cuestas.
El también ganador del Premio Príncipe de Asturias de Letras en 2004, comentó sobre su oficio durante la más reciente Feria Internacional del Libro de Guadalajara comentó sobre su oficio: “Los problemas que menciona el escritor son problemas de las personas, cada quien actúa como puede. Para mí ciertamente la pluma puede ser una especie de arma, pero no quiere decir que sea mejor que otras armas.”
Sin duda, las cuatro historias que se presentan en El conde y otros relatos son perlas que pudieron surgir de cualquier cotidianidad, y quien las encuentre se perderá en el brillo de su humanidad.