La antropología ha contribuido a nuestro conocimiento sobre las manifestaciones sociales y culturales, al estudiar cómo viven, visten y los rituales que realizan las comunidades en diversas partes del mundo, no sólo actualmente sino en el pasado. Hoy, el arte y la cultura han sido una forma de expresión utilizada por múltiples artistas para demostrar la realidad de la época que vivimos y cómo la sociedad se transforma con el tiempo.
Como parte de la campaña Encara el racismo, el Museo de la Ciudad recibe la exposición Cholombianos, la cual parte de una ardua investigación de cuatro años realizada por Amanda Watkins, diseñadora británica y maestra de la Universidad de Monterrey, sobre uno de los movimientos más notorios de los últimos 50 años en el país y que aún en la ciudad se conocen de manera natural gracias a artistas como Celso Piña y su inigualable sonido.
La muestra se conforma por un total de 2,600 piezas, entre ellas artículos, fotografías, instalaciones, viniles, la primera consola de cumbia rebajada y mixes del primer sonidero cholombiano, Gabriel Duéñez, así como vestuarios pertenecientes a este fenómeno nacido en Monterrey, que fusiona la cultura sonidera de la región con la cumbia colombiana traída por migrantes sudamericanos en su travesía para llegar a Estados Unidos.
Amanda Watkins explica que viviendo en Londres ya lo había visto todo. Sin embargo, su percepción cambió al llegar a México y conocer de cerca la extravagancia única de los Cholombianos de Monterrey.
“Me recordó mucho al movimiento punk de los 80s, era un evento que todos detestaban, pero que aún después de tanto tiempo sigue influyendo en la música y en la sociedad. Me siento muy afortunada por haberme topado con estos muchachos, que para mí son el mejor movimiento obrero después de los punks ”.
La exposición busca acercar al público a los Cholombianos, quienes inventaron su forma de vestir con paliacates de diferentes colores, sus tenis pintados con aerosol y sus cabelleras poco convencionales, para así poder entender el tipo de discriminación que vivieron por parte de la sociedad de aquel entonces. Es importante saber que los integrantes del movimiento no vestían así a diario todo el día; ellos tenían trabajos y una vida diferente fuera de los eventos sonideros que se armaban por las noches.
Desafortunadamente el movimiento tuvo una vida corta al habitar una de las regiones más peligrosas del país; al ser destacados por su rara vestimenta y su manera de comunicarse, la policía se encargo de prohibir sus bailes y lugares de reunión. El fin de los Cholombianos llegó tras el asesinato de varios integrantes de la banda, entre ellos el Kombo Kolombia en el 2013.
El jueves 19 de mayo a las 18:30 horas se llevará a cabo la inauguración de la exposición, donde se presentará la cumbia de Los Kombo Lokos desde Monterrey y las mezclas de DJ Randy Salazar, al igual que la presentación de un invitado sorpresa.
Cholombianos se basa en el libro homónimo publicado por la Editorial Trilce en 2013 y el apoyo del trabajo documental de la investigadora Ana Bárcenas, así como la colaboración de la Universidad Autónoma de Chapingo.
La muestra permanecerá hasta el 28 de agosto en el Museo de la Ciudad de México.