por Daniela Uribe
@DaniAcuarelas
En la época actual, las artes están en cambio constante y evolucionan día con día. El teatro, la música y la pintura ya no son como solían ser hace unos años. La compañía de danza L-E-V, fruto de la colaboración de la bailarina Sharon Eyal y Gai Behar, organizador de fiestas masivas tecno en Israel, ofrecen una propuesta que se ha catalogado como una de las mejores y originales dentro del estilo contemporáneo, titulada House.
“L-E-V no sólo es House. House es sólo una pieza del proyecto, somos como un gran pan y ésta es una pequeña rebanada. Nosotros estamos en cambio constante, lo que hace que la compañía sea una propuesta diferente”, dijo Sharon Eyal, también coreógrafa de L-E-V.
La obra, que presentarán en el Festival Internacional Cervantino, es una pieza emocional y espiritual que no cuenta una historia, sino que es una estructura elaborada para bailar, sentir y disfrutar de la música. Los siete bailarines en escena aprovechan la danza, la tecnología y las formas modernas de convivencia juvenil.
La música consta de la colaboración del DJ israelí Ori Lichtik, quien genera ambientes contrastantes, resultado de una mezcla de timbres y melodías de evocación folclórica.
Esta pieza de la compañía es un relato inesperado como suele ser la vida. “Es por eso que la compañía siempre ofrece algo nuevo, pero sigue siendo House, conteniendo el mismo sentimiento”, comenta la bailarina Keren Laurie Pardes.
L-E-V se presentará el 13 y 14 de octubre a las 20:00 horas en el Auditorio del Estado, como parte del eje temático Fronteras de esta 42 Edición del Festival Internacional Cervantino.