Los años pasan y no hay compositor que pueda siquiera igualar a los grandes maestros de la música clásica, como lo fue Ludwig Van Beethoven, un nombre conocido por muchos aunque pocos se toman el tiempo de escuchar y estudiar las creaciones del músico alemán.
Jos Van Immerseel, clavecinista, pianista y director belga, que además estudió órgano, canto y fortepiano, se ha dado a la tarea de interpretar y dirigir las nueve sinfonías de Beethoven (1770-1827) junto con su orquesta Anima Eterna, un espectáculo que se ha presentado en países como Francia, Bélgica, Alemania, Australia y Estados Unidos, entre otros, y que ahora viene por primera vez a México para presentarse en el Festival Internacional Cervantino.
“Es emocionante tocar las sinfonías de Beethoven. La sensación de una orquesta antigua es algo distinto a la de una moderna”, comentó el compositor belga, ya que las notas son diferentes por el fraseo, la articulación, los músicos, entre otros aspectos. Anima Eterna busca ser fiel a las fuentes de Beethoven para ejecutar las melodías del compositor alemán, pues utiliza un formato similar al de la orquesta sinfónica de aquella época.
Van Immerseel considera que su forma de acercarse a estas piezas es especial, pues lo que hacen los compositores actuales es cambiar todo y hacerlo a su manera, alardeando de sus posibilidades. En cambio, para Anima Eterna hacer música consta de tres pasos: del compositor a los músicos, de los músicos al público y del público a la orquesta.
Lo que comúnmente escuchamos son arreglos del siglo XXI, afirma Van Immerseel, y lo que él hace es más cercano a la época de Beethoven, en donde se tocaba con un tiempo y afinación diferente a lo que ahora se hace. “Los colores de los instrumentos antiguos son diferentes a los actuales, así como la forma y la técnica de uso son diferentes”, pero aún con estos detalles, su versión trata de acercarse lo más posible a la época de Beethoven.
Admitió que las nueve sinfonías son complejas, pero la 7ª, 8ª y la 9ª puede que lo sean más, debido a que en esa época Beethoven estaba cambiando de instrumentos y comenzó a incluir los cornos. El espectáculo que dará el director belga implica una gran responsabilidad, pues los movimientos, el ritmo, las partituras, la afinación, y demás detalles deben ser cuidados. “No muchos siguen la partitura ni el tiempo, no respetan la articulación ni las notas, lo combinan sin razón”.
En el concierto hará un balance entre los instrumentos de cuerda y los de viento. “Trabajamos muchas horas para lograr el sonido especial”. Además, comentó que desde hace varios años ya no graba en estudios, pues ya no cree en eso y ha decidido hacerlo desde los conciertos. En los coros participará la Dresdner Kammerchor, bajo la dirección de Michael Käppler y la participación de Andrea Lauren Brown, soprano; Marianne Beate Kielland, alto; Markus Schäfer, tenor, y Thomas Bauer, barítono.
Además, ofrecerá un recital de fortepiano, versión temprana del piano, en el que se destaca como uno de los máximos representantes. Entre las obras contempladas están Impromptu en do menor D899/1 (1827), 15 Deutsche Tänze D783 (1824) y Sonate en Si bemol mayor D960 (1828).
Por otro lado, Van Immerseel ha enseñado en prestigiosas escuelas de música, como el Conservatorio Sweelinck de Ámsterdam y el Conservatorio Nacional de París, así como dar cátedras magistrales en universidades y festivales.
“Hay muchos compositores valiosos en el mundo, pero lo interesante es tocar de manera diferente, descubrir cosas nuevas y compartirlo con el público. Debe ser fresco”, pues comentó que las personas casi siempre oyen la misma música clásica y por eso se torna aburrida para algunos.
No puedes faltar al Festival Internacional Cervantino en octubre, en donde tendrás oportunidad de escuchar la presentación de Anima Eterna con su director Jos Van Immerseel los días viernes 9 de octubre en el Templo de la Valenciana a las 12:00 horas; sábado 10, lunes 12, miércoles 14 y viernes 16 de en el Teatro Juárez a las 21:00 horas.