Por Nallely Santamaría
Sé parte de una experiencia que cautivará tus sentidos, por medio de proyecciones, luces, música y artistas circenses.
Arte y Cultura platicó con Carolina Jiménez, escenógrafa egresada de la Escuela Nacional de Arte Teatral del Centro Nacional de las Artes (Cenart), y autora original de la idea de El Jardín, un espectáculo que fusiona el teatro con el videomapping, técnica que consiste en proyectar imágenes en superficies reales; comúnmente se hace en muros de edificios.
“Cuando vi la convocatoria de México en Escena, lanzada por el Cenart, vi que era una muy buena oportunidad para hacer un festejo personal, por lo pronto, compartir con este recinto estos 20 años que llevo de estar haciendo artes escénicas y sobre todo porque como era al aire libre, pues también es pensar los espacios y la creación de otra manera”, dice.
¿Cómo fue su acercamiento con el videomapping?
Empecé a trabajar con Azael Sáens hace como 4 años, porque estaba buscando alguien que trabajara con video. Él ya tiene bastante tiempo haciendo videomapping y hemos visto que es un recurso que tiene un discurso propio, y que puede también tener un gran protagonismo; ahorita en muchas plazas podemos ver cómo hay videomapping en edificios muy importantes, pero pocas veces hemos visto que sea parte de un espectáculo, que sea además detonador de un concepto y no solo sea una pared.
Aunque solo se hace, en este caso en un edificio, sí es el resultado de todo el recorrido previo que se hace con más proyecciones y artes circenses. Ese ha sido el acercamiento que tuve y también generó que conformaramos esa compañía, que es Diseño Coreógrafo, en donde buscamos, a partir del diseño, generar provocaciones de movimiento, sensaciones y acción en los intérpretes y en el público.
¿Qué diferencia encuentra en hacer escenografía como antiguamente se hacía, a la que ahora que interviene la tecnología?
Es algo a lo que hemos estado obligados a tratar, porque la tecnología está predominando muchísimo en los espectáculos escénicos y cada vez se ha vuelto más conceptual la manera de trabajar el espacio. Éste es un muy buen ejercicio, porque no solo nos estamos saliendo del edificio teatral, sino que estamos partiendo a través de la tecnología para crear un nuevo espacio de sensaciones.
Junto con Azael buscamos generar provocaciones a los artistas escénicos y al público, a través del diseño del vestuario, del diseño de espacios con video, porque no pueden evitar ver que están en un espacio rodeado por la tecnología.
¿Qué sensaciones pretende despertar el espectáculo?
Vivir el jardín, las áreas verdes de otra manera, porque estarán rodeados de estímulos sensoriales, sonidos, luces; el mismo frío seguramente hará que el público disfrute de los espacios abiertos de una manera distinta. Creo que también esa es la intención del Cenart, de vivir esta convocatoria para salir del espacio teatral y brindarle al público una experiencia escénica fuera de los muros del teatro.
Para nosotros es una provocación como creadores, porque significa una logística muy distinta a la que estamos acostumbrados, pero también es un reto que hemos disfrutado mucho porque hemos descubierto muchas maneras distintas de hacer las cosas con las pruebas que hemos estado haciendo; cosas que creíamos que iban a funcionar de una manera, vemos que funcionan mejor de otra justo por el espacio en donde estamos trabajando. Y también con los intérpretes es la respuesta que hemos tenido, no tienen que contar una historia que ya está predeterminada, sino que ellos deben generar la historia a través de su desarrollo corporal, que también por eso creo que el circo es el mejor complemento de este espectáculo, porque los intérpretes circenses retan la naturaleza de su cuerpo para hacer cosas que son extraordinarias.
Esperamos que el público pueda llevarse como reflexión, pensar el constante cambio que tiene la naturaleza. Es invitar a pensar que todo sigue moviéndose y sobre todo la naturaleza siempre está presente y siempre está haciéndose escuchar de alguna manera, que por mucho que estemos rodeados por una arquitectura hermosísima, la naturaleza siempre es lo que predomina tarde o temprano. Los humanos igual en algún momento nos extinguiremos y la naturaleza buscará otras maneras de sobrevivir, segurá mutando, transformándose.
El recorrido que hacemos es desde los impulsos energéticos más básicos hasta ya un dominio y casi una reconquista del edificio, que en este caso vamos a terminar con una proyección de videomapping en la Escuela Superior de Música.
¿Cómo se desarrolla el recorrido?
Empieza en el Teatro de las Artes hasta la Escuela Superior de Música, donde estará rodeado de estímulos lumínicos a través de proyecciones, en donde se van a ver entes y partículas energéticas y de luz, que se irán transformando y alimentando la naturaleza de otra manera, hasta retomar el control, acompañados todo el tiempo de seres mutantes que son los artistas circenses, que acompañarán al público, les irán indicando el camino para poder ver cómo se va transformando esta energía hasta una reconquista del espacio, por decirlo de alguna manera.
Participa en la primera edición de El Jardín, Naturaleza Futura, espectáculo que demuestra la fusión entre el arte escénico y la tecnología, haciendo que el espectador sea transportado a un mundo en donde sus sentidos son los protagonistas.
El espectáculo tendrá lugar en las áreas verdes del Centro Nacional de las Artes este 5 y 6 de diciembre con funciones a las 20:30 y 21:30 horas. Entrada gratuita.
“El Jardín” Naturaleza Futura from Jazzael Áche-Sáenz on Vimeo.