GUANAJUATO, México.- Ser poeta y escritor de teatro quizá sería suficiente para Roald Hoffmann, pero su curiosidad va más allá y hoy es reconocido como uno de los químicos más importantes, tras ganar el Premio Nobel en 1981.
La temática del Festival Internacional Cervantino relaciona dos disciplinas que se unen de manera magistral, el arte y la ciencia. Dentro de las actividades del programa La danza de las neuronas, Hoffman compartió algunos poemas de su libro Catalista en el Museo Gene Byron, en Guanajuato, además de ofrecer la conferencia La química del arte y el arte de la química, en el Teatro Juárez.
“Las diferencias entre arte y ciencia son cuestiones universales contra las particulares, así como soluciones y resoluciones”, dice el científico.
La vida de Hoffman se vio marcada por caos y tragedias desde una temprana edad, al presenciar una de los acontecimientos más trágicos de la historia humana: el holocausto. La supervivencia de él y sus padres tuvo que ver con un desconocido ucraniano, quien los refugió en el ático de una casa, y a quien le pagaban con monedas de oro. Hoffman recuerda que el oro era lo de menos, pues simplemente era un buen hombre que arriesgó su vida para salvar a su familia, hasta que pudieron navegar a las costas de Estados Unidos. 70 años después, la hija del ucraniano buscó a Hoffman y a su madre para regresarle algo que le pertenecía: un anillo que utilizaron para pagarle al ucraniano. La madre de Hoffman se conmovió tanto que lo único que pudo decirle fue: “esto es algo que te pertenece a ti”, y se lo entregó de vuelta. De esta gran anécdota, resultó el guión para la obra Algo te pertenece a ti.
Hoffman explica que la química es un tema de gran importancia pues las drogas farmacéuticas y algunas conocidas como ilegales, tienen un gran impacto en la salud del cuerpo humano. Inclusive, hace mención al fenómeno que fue la serie Breaking Bad, al decir que la química en realidad es algo sumamente fácil.
En cuanto al arte, Hoffman también es poeta y dramaturgo y confiesa que es fanático de la música de todo el mundo, en especial la música latina, y por esa misma razón disfruta mucho recorrer las calles de Guanajuato.
“La relación entre ambas tiene que ver con el proceso de creación, el nivel de artesanía bien elaborado es lo que le da tanto a la ciencia como al arte su gran significado”, comentó el premio Nobel.
El químico alega que la ciencia es algo creado por humanos y enfatiza que estos no son ningún ser celestial e inclusive que ser científico no es lo mismo a ser una buena persona. Sin embargo, comenta que nuestra sociedad debería tener más modelos a seguir pertenecientes al mundo de la ciencia, en vez de jugadores de fútbol o cantantes de pop.
Por último. sugiere que los gobiernos deberían destinar sus recursos en la educación enfocada específicamente en las ciencias y el arte, pues de esta manera, se tendría un mejor funcionamiento social en todos los países.